El jueves estuve viendo al grupo Los Calis y volví ha recordar las canciones que solían poner en los autos de choque (Los Chichos, los Changuitos…y Los Calis).De aquel grupo madrileño de rumbas, solo queda como dice la canción de Estopa “el del medio”. Y el pobre, ya no esta para muchas músicas.
Ahora le acompañan, un sobrino y “un primo sobrino” que hacen lo que pueden.
Pues lo que os decía, me recordaron las rumbas de cuando yo soñaba en chicas guapísimas e inalcanzables (porque ahora han elegido la peor vida, al lado de una lacra como la droga) y me hicieron rejuvenecer unos cuantos años.
Hoy, en este barrio mió de toda la vida, ni ponen barracas durante las fiestas y por deducción, tampoco música en las barracas.
El espectáculo comenzó antes del concierto con los 30 minutos de retraso, mientras que ha su llegada el publico temió por la integridad de los cantantes que indicaban entre sus canciones “tenemos que beber, beber agua de fuego –whisky-“.
Cantaban en play-back y se confundían, todo un gran espectáculo.
Buenas Jose Luis,
ResponderEliminarCon tu permiso te enlacé desde mi blog comentando por encima la experiencia que aquí relatas.
Por si quieres echarla un vistazo, aquí está: Los Calis - Heroína
yo soy de la generacion de los calis..y ojala vinieran otraves para tenerife aunke canten en playbac o en pelotas...junto con los chichos fueron los mejores años de mi vida....un saludo para la generacion chichera y sobre todo el dios jeros (jeros95#hotmail.com)
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